RECONVERSIÓN. HISTORIA SAGRADA CHUSCA REVISITADA II

Para trago, el que tuvo que pasar el jefe de prensa de Yahvé cuando, en vísperas del Diluvio Universal, compareció ante representantes de todos los medios de Palestina, para comunicar que, en el concurso para la construcción de un arca, la propuesta elegida era la de un astillero coreano.

El pobre Noé, que había puesto todo su empeño en diseñar una embarcación superlativa, se vino abajo, y empezó a beber desaforadamente nada más comunicarse el fallo.

Mas se dice del Altísimo que aprieta, pero no ahoga. Así, recondujo los pasos de su siervo una vez recobrada la consciencia, y lo instruyó para que no se desperdiciase el trabajo hecho.

Lo guió, con sus planos bajo el brazo, hacia el lugar llamado Costa del Sol

Desde ahí, desarrolla una fructífera labor empresarial comercializando barcas insumergibles e incombustibles, plataformas ideales para la preparación de las brasas para los espetos.

Ilustración: Embriaguez de Noé. Michelangelo Buonarroti (Detalle de los frescos de la Capilla Sixtina, 1509).

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: